Ambos deben estar contentos

Ambos deben estar contentos
Gran duelo. España e Italia empatan un enfrentamiento emocionante y competido.
Di Natale adelantó a los italianos pocos minutos después de entrar y el azulgrana Cesc Fàbregas, que jugó como falso delantero centro, empató poco después.
Si en la España de los últimos años se añade una Italia diferente a la de siempre, un equipo que decide usar sus jugadores de calidad para mirar la portería contraria, por fuerza el resultado de la mezcla debe ser un gran espectáculo.
Y así fue. Porque lo que se vivió ayer en Gdansk fue un partido de babero, con dos equipos que quisieron ganar y que hoy, cuando reflexionen en frío, podrán estar orgullosos con el punto conseguido.
Del Bosque buscó sorprender Prandelli jugando con Cesc de falso 9, como ya había hecho Guardiola en el Barça.
El técnico italiano, por su parte, también sorprendió, y no con la elección de ningún jugador, sino porque decidió jugar mirando la portería rival sin miedo.
De hecho, su equipo fue superior en la primera parte y por momentos tomó el balón al equipo rival. Con Pirlo y Cassano aportando la magia, el resto se movía sobre el césped con una armonía perfecta.
Cuando tenía el balón España, presión avanzada. Y si el esférico pasaba del centro del campo, entonces sí, defensa de cinco y líneas bien juntas, una telaraña temporal impenetrable.
España, sorpresa, sufría para avanzar con precisión y sólo con ramalazos de clase de Iniesta y de Silva era capaz de acercarse a Buffon.
En estas circunstancias, los intentos españoles se limitaron a disparos lejanos. Italia, por su parte, encontraba petróleo en las diagonales de Cassano. La ocasión azzurra más clara, en el último minuto, en un centro precisa de Talentino a Motta, que hizo trabajar a Casillas.
De ida y vuelta
Con la reanudación, ambos equipos dejaron en los vestuarios la poca miedo a perder que les quedaba, convirtiendo el partido en una ida y vuelta deliciosa. Y con espacios, España comenzó a carburar de la mano de Xavi y de Iniesta. Primero Cesc (49 ') y después Iniesta (50') obligaron a Buffon a trabajar.
Italia, sin embargo, no se arrugó, y acto seguido disfrutar de una gran ocasión fabricada por Balotelli, que birló el balón a Ramos. El delantero del City, sin embargo, se durmió y Ramos mismo solucionó el susto.
En la siguiente acción ofensiva azzurra , pero, ya no hubo más concesiones. Arranque de Pirlo, asistencia en el espacio y gol de Di Natale (60 '). En otras épocas, este gol habría hundido España, pero no este equipo, repleto de jugadores acostumbrados a ganar, que sólo sacar del centro del campo fue por Buffon, sin prisa, pero sin pausa.
Y sólo tres minutos después llegó el empate, en una jugada al primer toque iniciada por Xavi, continuada por Silva y ejecutada por Cesc, una diana que dejó tocados a los italianos y aún envalentonó más el combinado estatal, que dio un recital.
Al final, Del Bosque hizo entrar Fernando Torres, que gozó de dos ocasiones inmejorables para marcar, dos uno contra uno con Buffon, al 74 'y al 84', y que falló inexplicablemente.
Ya en los últimos minutos, con el partido roto, aunque podría haber marcado Italia, en un disparo de Marchisio que Iker Casillas pudo detener.

LA ELEGANCIA
Iniesta, elegido el mejor del partido, y Pirlo dieron todo un recital de clase
Iniesta, Xavi y Cesc criticaron el estado del césped, que no quisieron regar
Del Bosque, satisfecho con el partido

El seleccionador español, Vicente del Bosque, se mostró satisfecho con el partido que hicieron sus hombres y también con el empate.
"Podría haber ganado cualquiera de las dos selecciones para que el partido ha sido abierto, pero creo que nosotros hemos tenido más el control del balón", explicó el técnico salmantino, que no sabe si el empate es un buen resultado: " Lo sabremos después de los próximos partidos.
Creo que lo más importante es que hemos dado una buena imagen contra un equipo peligroso que nos ha discutido el balón en algunas fases del partido. Yo ya había avisado que la selección italiana era un buen equipo y que no se cerraría como decían muchos, que nos presionaría. "
La gran sorpresa en la alineación de la selección española fue la presencia de Cesc como falso delantero centro, dejando Torres, Negredo y Llorente a la grada.
Del Bosque quedó satisfecho con la prueba: "Lo he hecho para tener más hombres en el centro del campo y creo que Cesc ha jugado bien, no sólo por el gol."