recortamos distancias

Llegó el tropiezo del Real Madrid. 
Los de Mourinho llevaban ya varios partidos  que no estaban finos y ayer el Málaga de Manuel Pellegrini, el técnico desechado por el Real Madrid, logró su venganza personal y se llevó un punto del Bernabéu, más que merecido.
Un golazo de Santi Cazorla, un jugador que rechazó una oferta del Madrid, hacía justicia en el tiempo añadido a un Málaga que en el global del partido fue mejor al Madrid y que con un poco de suerte se podría haber incluso llevado los tres puntos.
Un contragolpe letal con centro largo de Cristiano Ronaldo al segundo palo, donde apareció Benzema que no perdonó.
El 1-0 más injusto a los 35 minutos de juego.
Hasta ese momento sólo un equipo apostaba por el fútbol y disfrutaba de ocasiones para merecer adelantarse en el marcador, el Málaga (Rondón, 4', y Monreal, 14').

El Madrid, aunque se adelantaba en el marcador, volvió a demostrar, como en sus últimos partidos, que no atraviesa su mejor momento de forma, pese a que los resultados continuan acompañándole.
Lass sentó a Arbeloa, pero no encontró el sitio y su banda se convirtió en un buen pasillo para que entrara Monreal e Isco.
Khedira no andaba acertado en el centro del campo, Kaká luchaba, aunque tampoco estaba fino.
Cristiano volvía a hacer la guerra por su lado y Ozil no estaba en el campo.
Y Benzema, sin hacer nada, apareció en el momento más oportuno para marcar.
En el segundo tiempo, el Málaga bajó el pistón, mientras que el Madrid se encontraba más cómodo sobre el campo, sobre todo desde que Ozil empezó a entrar en juego.
Pero el mayor peligro seguía llegando al contragolpe.
Quien no bajó el pistón fue el meta Caballero que aguantó el tipo de principio a fin. Pellegrini intentó refrescar el equipo, pero quitó a sus mejores hombres, Isco y Joaquin, dando entrada a Van Nistelrooy y Seba Fernández.

Empujó el Málaga en los minutos finales y sufrió el Madrid, y mucho.
Tanto que al final, ya en el tiempo añadido, Cazorla marcó un golazo de falta que hacía justicia a los méritos del Málaga.
Un empate a 1 final que devuelve la emoción a la Liga, con el Barça, que no falló, y recorta distancias
(8 puntos).